En los pasados meses en este blog ya te hemos mencionado algunas de los valiosísimos aportes que depara el aprendizaje de idiomas, especialmente en la etapa infantil y juvenil. Condiciones que mejoran como la consciencia global, las capacidades cognitivas o la seguridad personal son certezas alejadas de toda duda.

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Desde edades tempranas, el aprendizaje de idiomas es más que recomendable.

Así las cosas, en el presente post te traemos novedades por las cuales hemos de afirmar de manera contundente que el aprendizaje de una segunda o tercera lengua es una de las mejores actividades que los peques (y no tan peques) de la casa pueden llevar a cabo  de cara a su provecho presente y futuro.  ¡Y no lo decimos nosotros! Recientes balances del Summer Institute of Linguistics (SIL) exponen que se calcula que actualmente son cerca de 840 millones de hablantes los que poseen el inglés como segunda lengua. Para los estudiantes, este esfuerzo en comprender una nueva lengua se puede traducir en lo siguiente:

1.Aumento la capacidad de resolver conflictos intelectuales con mayor precisión.

2.Mejora de la capacidad de pensamiento crítico, de reflexión y de memoria.

3.Ayuda a incrementar la capacidad de concentración y de hacer varias tareas simultáneamente.

4. Mayor capacidad lectora y de escucha, lo que posibilita sin ir más lejos que disfrute de sus películas y canciones en versión original.

5. Les anima a conocer e interesarse por nuevas culturas.

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